un cumpleaños en oaxaca

llamó mi madre para felicitarme, yo en la plaza principal recibía la llamada de ella,
entre tanto: mañanitas que entonó en chino mandarín  la chica de Canadá que conocí en la central de segunda de Oaxaca, entre perros e indigentes,tianguis, caldo de res de desayuno y chocolate en agua, montañas, nubes, nieve, pollo en salsa de chicatana, agua de batabel con cacahuate, rambután, neblina, ellas, ellos, nosotros, hostal, la banda, hilos, maracuya, mezcal y mezcal con moras, música, otra vez mañanitas, aventón, xoloitzcuintle, tamales de chepil, agua de chilacayota, nieve de guayaba y pa' cenar tlayudas...

Leyendo a la Tia Chofi de Jaime Sabines recordé a Barbara una mujer entrada en años, de piel arrugada, ojos grandes, sonrisa tierna, sombrero sucio y siempre una bolsita de plástico en mano. en esta llevaba los dulces que vendía  en una calle muy transitada, dentro de un barrio rico de la ciudad de México, para sobrevir. Un dia, después de muchos verla, platicamos bajo la lluvia en ese semáforo, aprovechando que los carros seguían su camino, me contó su vida, del ir y venir de una colonia del otro lado la ciudad, ahí donde vivía sola y cocinaba frijoles, lentejas, sopas y verduras, barbara decía que comía como un conejo, al mismo tiempo me platicó que nunca se había casado, ella no sabía lo que era estar con un hombre y que hasta esa fecha no había tenido novio. Como la Tía Chofi te sentí desamparada barbara, pero no tan sola como ella, tú platicabas  con quien te compraba de tus dulces y a quien le invitabas el café, como a mí. Como la Tía Chofi no tenías ese gesto agrio de las solteronas, me ha recordado tanto a tí, pasado más de un año y en mis letras estabas olvidada y hoy de pronto veniste a mi mente a desempolvar la breve historia que tú y yo construimos esa tarde fresca y mojada. Como a la Tía Chofi exijo que los ángeles te tomen y te conduzcan  a la morada de los limpios y deseo Barbara querida que sigas en este camino y endulzando la vida agitada de muchos.

esa no soy, esa la que ustedes crean e imaginan no soy, ella soy yo, la que no ven a los ojos ni al alma, esa la que esta allí sonriente no soy, esa la que esta provocando tampoco soy, ella, la chica de las ruedas de sal soy yo, la que muestra los dientes, la que ella misma esconde sus ganas soy yo. 

la realidad del sueño

Creo que por un tiempo dejare de viajar, lo venía pensando semanas atrás y lo comprobe con el sueno que tuve anoche. En el sostenía unas tijeras y cortaba en tiritas mi mochila, esa donde metía mi vida y algo de ropa,  para recorrer kilómetros y llegar a ellos, a ustedes.
Llegar a ti hombre greñudo que me invitabas a tú casa a desayunar y a tomar un baño caliente del cual carecía a menudo,
llegar a ti joven de cabello blanco y ondulado que compartías conmigo tus experiencias de lucha, la muerte de tú padre y tú nuevo amigo, el insomnio,
llegar a ti joven estudioso y escritor de una tesis que acaparaba más tú atención que yo con quien compartías tu cama,
llegar a ti hombre y mujer de corazón que con un abrazo y las olas del mar como música sellaban nuestra hermandad,
llegar a ti mujer guerrera que desde el primer momento compartimos secretos que después serían revelados, llegar a ti negro que me diste de tú tiempo y un poquito de tú vida, pero mucho de tú amor,
llegar a ti chango con quien compartí miradas y palabras cortas y después un cigarro,
llegar a donde mi vida se cruzo con las de ustedes, cuando de regreso venía con mucho menos en la mochila y  muchas más en las ganas, pero al final solo fue un sueño, al rato remiendo las tiritas.

de nuestro lenguaje...

coffee, chocoliet esponchs, movies with out subtitles, mucho noise, rewind and rewind... and rewind, cachetadas merecidas y miradas cansadas, esperar a la noche y dormir en ella, despertar when tonatiuh say hello...

let's tagging around the world, escribamos, pintemos lo que la vida nos da, lo que de ella probamos, disfrutemos y tropecemos, comamos venaditos de aquí a la plenitud, en el camino las espinas se clavan y cuentan la vida. Unámonos a las estrellas, a los planetas, con el cielo y las nubes y con los 7 colores pintemos nuestra historia.

(5 de octubre)

buena vida foeva,
like el coatl ollin knows, y ce acatl aprendió
thirty pedaleadas al monociclo,
que marcan las decisiones radicales,
recuerdos a tu vida, que te mantienen vivo
en medio de esta barbarie,
ir y venir, olor a gasolina,
fuego en medio de la noche,
talones partidos por las ansias de
conocerte, cabezones con sabor amargo y
viaje infinito que atravesaron el desierto para
llorar y contemplar las estrellas, reconocer a
tezcatlipoca en medio del suave humo, sentir
al tacto que estamos vivos, con los ojos vendados
aun en medio de penumbra e incertidumbre de
saber si la vida sigue, ahí olor a muerte y olor a
vida que costo 700 borregos y adrenalina nula
por el cielo y el desierto entero, por las
noches y las mañanas, por los cactus, por el
fuego, por las papas, el arroz, el queso, por una
llamada a mamá, por estar vivos
en medio de las espinas.